La felicidad que buscan los letrados, es la que se encuentra en el destello de los ojos que la ignoran, pero la viven. Me recordaste al Lobo Estepario, fascinado con Armanda y sorprendido de saberla feliz, a pesar de no haber leído un solo libro.
Hola, yo no podría estar más de acuerdo con todos.
Por cierto Rafa, dile a tu tía que cerca de Oviedo, en una pequeña aldea llamada Pedroveya, se encuentra un pequeño restaurante, que siempre está a tope de gente, se llama Casa Generosa, no hay pérdida no hay ningún otro. Se come de maravilla, fabada, pote de berzas, cabrito al horno y ternera asada, todo ello lo culminas con uno de los mejores arroces con leche que he provado en mi vida, recomendable 100%.
Si yo fuera tú, no la dejaría escapar sin prepararme un arroz con leche de esos que sólo los asturianos saben hacer. Te comerás hasta la cuchara, jajajajja.
8 comentarios:
oh, si... el que nada sabe, nada teme...
La felicidad que buscan los letrados, es la que se encuentra en el destello de los ojos que la ignoran, pero la viven.
Me recordaste al Lobo Estepario, fascinado con Armanda y sorprendido de saberla feliz, a pesar de no haber leído un solo libro.
Bendita ignorancia!
el paraíso es la felicidad???
arre!
Así es... confirmado ante notario publico.
Hola, yo no podría estar más de acuerdo con todos.
Por cierto Rafa, dile a tu tía que cerca de Oviedo, en una pequeña aldea llamada Pedroveya, se encuentra un pequeño restaurante, que siempre está a tope de gente, se llama Casa Generosa, no hay pérdida no hay ningún otro. Se come de maravilla, fabada, pote de berzas, cabrito al horno y ternera asada, todo ello lo culminas con uno de los mejores arroces con leche que he provado en mi vida, recomendable 100%.
Si yo fuera tú, no la dejaría escapar sin prepararme un arroz con leche de esos que sólo los asturianos saben hacer. Te comerás hasta la cuchara, jajajajja.
Un beso y ¡Viva Asturias!.
Jolín, se me fue el dedo a la "v" en "probar". Espero no lo lea el anónimo de tu entrada anterior, ¡menudo rapapolvo!, jejejeje.
los últimos tres son muy buenos.
qué buen humor, rafa!
abrazo
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