El capítulo de esta semana de la serie Dr. Who -programa trasmitido por la BBC Entertaiment- tiene por argumento la invasión alienígena a la tierra; de pronto se desata un guerra interplanetaria sin más ni más.
Después de ver el adelantó de la serie, me quedé reflexionando en la postura que deberíamos tomar en el caso de que esto fuera real y nos sucediera en estos días. La única conclusión factible que encontré fue la deposición de las armas y la entrega inmediata del planeta a los alienígenas; al menos me parece lo mas honesto y digno por hacer. Pregunto ¿Cuál sería el derecho y bajo que estatura moral podríamos apelar a la defensa del Planeta Tierra, siendo nosotros los primeros destructores del equilibrio natural de este? En efecto, el ser humano el enemigo más implacable y abrasivo del lugar donde vive y sin poder esgrimir el respeto de si mismo y de su hábitat como principal argumento, sólo encuentro balbuceos que tienen que ver con el capitalismo y la propiedad privada.
En fin, si hipotéticamente sucediera la invasión, que al final del día es extraño que sucedan cosas buenas por aquí, probablemente sería la única solución viable para evitar la destrucción del tercer planeta por el hombre.
P.D. Bueno, pero para enterarnos porque nos vienen a madrear desde tan lejos, veamos el episodio de Dr. Who que pasará el sábado 21 de febrero de
3 comentarios:
O sea que, en el caso hipotético de una invasión alienígena, tú serías de los más felices. Eso es como el anarquismo y el abstencionismo y el chauvinismo a la inversa y a la externa y el odio a la humanidad y la misantropía a niveles alarmantes, todo junto y revuelto, en una SOLA persona: tú.
Como que hay quienes se la vive especulando tales cuestiones. Mi hermano, por ejemplo. Diario suena con que lo abducen. Yo siempre digo que, por ser fan de Star Wars, mi visión de los aliens es amigable y divertida. Por eso no pienso que vengan ni que nos hagan daño. De hecho, no pienso en ellos salvo cuando están relacionados con Chewbacca o Greedo.
Ya. A Lilián le faltó decir que, además, le vas a las ches chivas.
¿Y qué pasó? No me deje como Kalimán, Merino.
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